miércoles, 9 de marzo de 2016

El Fracaso de Hilary Clinton en Michigan






Si no lo vio por la televisión ayer por la noche o al leer los periódicos nacionales esta mañana,
la victoria en Michigan de Bernie Sanders, se encuentra entre las mayores sorpresas en la historia de las primarias presidenciales.

En caso de ganar la nominación será recordado como la mayor sorpresa de cualquier tipo en la historia política de Estados Unidos.

La vieja política ha terminado. Las líneas de falla de la nueva política no son cuestiones culturales como armas, el aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo que dividen a las bases demócratas y republicanos. Son cuestiones de la reforma política y la justicia económica que dividen a las élites de los partidos tanto de las bases de ambas partes y el pueblo estadounidense de su gobierno.

En estos temas se encuentran las elites de ambas partes sorprendentemente igual. Entre ellos: el comercio mundial; la desregulación financiera y el enjuiciamiento de los delitos financieros; la red de seguridad social, incluida la Seguridad Social, Medicare, un salario digno y la atención de la salud para todos; por encima de todo, la "corrupción suave" de pagar para jugar la política.

Hillary Clinton no tiene ni su toque personal diestro ni habilidades verbales. Cuando se trata de distraer la base o papel sobre sus diferencias con las elites, los votantes ven a través de ella, aunque, en sus corazones, ellos no la quieren. En Michigan trató de manchar a Sanders como un enemigo del rescate automático.

Ella ha tratado de imitar posiciones de Sanders en el comercio global, el cambio climático, la aventura militar, un salario digno y la atención sanitaria universal. Sin embargo, siempre es demasiado poco o demasiado tarde.

No hay comentarios:

Publicar un comentario